El país está ubicado en la península balcánica con salida al mar Adriático. Tiene una historia y cultura muy antiguas. Su territorio ha sido habitado por los ilirios. Más adelante fue adherido al Imperio Romano y el Imperio Bizantino. Durante el siglo VII sus tierras fueron ocupadas por los eslavos, que asimilan los lugareños. En el siglo XV fue conquistado por el Imperio Otomano. Ha sido ocupado también por austriacos, italianos y alemanes. Montenegro ha sido parte del Reino de los Serbios, Croatas y Eslovenos y más tarde parte de Yugoslavia. Desde el año 2006 es un país independiente.
Los inversores de inmuebles en Montenegro han sido atraídos por la naturaleza única. El país pequeño de territorio tiene 40 lagos, 293 km de longitud de costas y 52 km de los cuales son hermosas playas de arena. Montañas altas, desfiladeros, barrancos, los ríos, la bella costa del mar Adriático y el clima suave atraen los turistas. En territorio de Montenegro se encuentra el fiordo más sureño en el mundo. Los recursos naturales y el precio bajo de los inmuebles ofrecidos en Montenegro crean premisas de un buen desarrollo del mercado de la vivienda y la propiedad vacacional.
El interés por las propiedades en Montenegro está centrado sobre todo en la capital Podgorica y en las regiones del Mar Adriático. Debido a la inestabilidad política en los países de la antigua Yugoslavia, los inversores extranjeros se abstenían de invertir. Últimamente la situación en la zona se ha tranquilizado lo que ha provocado la gente con dinero que invierta en propiedades en Montenegro.
Aunque las propiedades tienen precios asequibles, se espera un crecimiento repentino, debido al creciente interés y la oferta limitada. No hay restricciones para los extranjeros a la hora de adquirir inmuebles. Ciudadanos de otros países tienen derecho a comprar propiedad residencial y comercial. Para las parcelas no construidas se requiere tener una empresa inscrita en el país. Montenegro activamente ofrece inmuebles atractivos. Su objetivo es atraer dinero fresco y hacer que el mercado sea competitivo a la costa adriática italiana.
