República Checa se encuentra en Europa Central y incluye las regiones históricas de Bohemia, Moravia y Silesia Checa. El estado checo se fundó en los principios del siglo X pero cinco siglos antes su territorio ha sido habitado por las tribus eslavas. Hasta el año 1993 República Checa y Eslovaquia estuvieron unidos en un estado común llamado Checoslovaquia.
El interés por parte de los inversores en inmuebles en República Checa es más grande en Karlovy Vary. El centro turístico provoca interés en los emprendedores con el número de turistas que lo visitan. Los precios de las viviendas son más bajos únicamente de los precios en la capital. Aunque el valor es más alto del valor medio para el país, queda en un nivel mucho más bajo comparado con otros centros termales. La compra de propiedades en República Checa es una maniobra financiera muy buena.
La inversión en inmuebles en República Checa es provechosa no sólo por las áreas bellas, visitadas por numerosos turistas. La capital de Praga es una de las ciudades más bellas en Europa. También es muy importante la situación económica del país y la buena política tributaria. En República Checa, inmuebles se buscan tanto en la capital de Praga como y en las ciudades grandes de Ostrava, Pilsen, Brno, Hradec Karlove, Mlada Boleslav.
El mercado inmobiliario en República Checa está abierto para extranjeros. De todos los inversores extranjeros, los rusos son líderes. Una quinta parte de las transacciones inmobiliarias se realizaron por parte de rusos a pesar del régimen de visados. Algunos de ellos vienen temporalmente mientras otros se asientan en el país. República Checa ofrece propiedades atractivas a precios asequibles. La prueba de ello son los inmuebles comprados por parte de personas con ingresos medios.
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