Situado en la costa de la Riviera francesa, Mónaco es el estado soberano más pequeño después del Vaticano. Lugar mítico situado a los piés de los Alpes y bañado con el suave azul del mediterráneo, es a la vez un sueño y una realidad. En el Principado todo está preparado para satisfacerle. Ciudad del lujo y de la belleza, Mónaco sigue haciendo a sus visitantes soñar.Ejercita un fuerte poder de atracción debido a su estatus de paraíso fiscal, exclusividad y seguridad. Comprar inmuebles en Mónaco significa hacerlo en una ciudad-estado símbolo que cada año atrae a los súper ricos de todo el mundo. Debido a la amplia demanda del sector inmobiliario de lujo, han sido construidas, en los últimos años, decenas de modernas residencias de alto standing con todo tipo de comodidades.
Mónaco es sinónimo de excelencia y alta calidad. La mejor forma de describir Monte Carlo sería como: “la crème de la crème”. Un pequeño lugar, pero con todo lo necesario para vivir con glamour. La ciudad es un “polo de atracción” para muchos extranjeros con alto poder adquisitivo. El mercado de propiedades en Mónaco está en pleno crecimiento. Más de la mitad de las inversiones son hechas por personas no-residentes, sobre todo franceses que se benefician de las ventajas sobre el impuesto de sucesión.
El principado es famoso por sus vistas panorámicas de película, el glamour característico del palacio real, el casino de Montecarlo y por ser sede de eventos de relevancia internacional.
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